Monreal, ‘Mansión del rey Celestial’.

La fundación de Monreal es conocida gracias a un texto del Arzobispo Guillermo de Aux en que solicita ayuda económica para la milicia creada en la ciudad.

Fue el Rey Alfonso I de Aragón el que creó Monreal, por voluntad propia, en las cercanías del río Jiloca para crear un camino desde Aragón hacia Jerusalén a través del Levante mediterráneo y una cofradía militar llamada Militia Christi.

En escritos, el nombre de Monreal aparece a partir de 1124. Se tienen datos con los que poder afirmar que la creación de la ciudad se encuadra entre 1120 y 1124. El núcleo en torno al que se fundó la ciudad fueron el Castillo de Monreal, la torre y la iglesia situada en la misma fortaleza.

Durante la historia, la ciudad de Monreal fue empleada como lugar fronterizo y vital para la repoblación del valle del Jiloca. Esto sucedió con seguridad allá por la Edad Media para ser aprovechada por el Rey Alfonso I en sus guerras. Monreal se convirtió en la última posición fronteriza guarnecida por la milicia.

El avance de los siglos y todos los avatares del tiempo convierten la ciudad en lo que ahora es: una zona de industria en auge. En el siglo XX, desarrolló el mayor crecimiento de su historia en cuanto a superficie urbana. En el año 1901 se inaugura el ferrocarril, y a partir de entonces, se construyeron nuevas calles y zonas transitables. Estos lugares se van nutriendo de edificaciones hasta la actualidad, produciéndose en los últimos años una nueva eclosión urbana con la construcción de unifamiliares adosados.

Tradiciones.

Semana Santa.

Una de las tradiciones perdidas que se está tratando de recuperar es el ‘Abajamiento’ o descendimiento. Se celebró en el ayuntamiento desde 1862 hasta 1959. Era un acto público que se sucedía antes del pregón sobre las seis de la tarde el viernes de Semana Santa.
La tradición consistía en ‘abajar’ un Cristo crucificado y luego plegarle los brazos alrededor del cuerpo al introducirlo en urna que iba a ser su sepulcro. Todo ello se representaba sobre un entablado de madera. Previamente se representaba el Sermón de las Siete Palabras apagando 7 velas en el escenario . Después, lo bajaban con ayuda de una sábana.

Si quieres echar un vistazo al libro de Historia de Monreal, aquí te dejamos el enlace.
http://xiloca.org/data/Bases%20datos/Monograficos/6152.pdf